La verdad es que me encantaría visitar Marte. Tendría un problema porque me dan miedo las alturas y eso de viajar en nave espacial no me iba a sentar muy bien. Lo primero que haría sería mirar a la Tierra. Tiene que haber unas vistas increíbles.
La verdad es que no me gustaría visitar Marte pues requiere de una preparación enorme y no pienso que pasase la criba. No soy de esa clase de exploradores que invierten meses en atravesar el medio interplanetario hasta llegar a su objetivo y, de momento, me conformo con estudiar las rocas que nos llegan de Marte en forma de meteorito. Pero si pudiese visitar la superficie marciana excavaría hasta dar con el agua helada que cubre buena parte del subsuelo e intentaría encontrar evidencia de vida o fósiles en esos estratos. A saber si futuros estudios desvelan que la vida sencilla, quizás microbiana, pudo surgir hace miles de millones de años en ese planeta. Todo está por descubrir. Hablo de esto en mi libro: http://publicacions.uab.es/llibres/fitxa_web_llibres.asp?ID=1788
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