Vendrían a ser los diferentes entornos en los que determinadas especies pueden vivir. Hoy en día conocemos que muchos organismos son capaces de vivir en condiciones muy diferentes al ser humano. Existen bacterias llamadas extremófilas que viven a altas presiones, o altas temperaturas, o en entornos muy ácidos, en rangos muy diferentes. Cada planeta puede poseer nichos diferentes de habitabilidad, adecuados para cada uno de esos organismos. Por ejemplo, Marte todavía podría poseer microorganismos en el subsuelo dada la enorme cantidad de agua que alberga en forma de permafrost y que podría encontrarse en forma líquida, en regiones internas de naturaleza hidrotermal en el interior de sus regiones volcánicas, como por ejemplo Tharsis. Cierto es que la superficie de Marte no puede permitir vida como la conocemos pero si algún día afloró en Marte podría haber migrado con el cambio de las condiciones superficiales preservándose en aquellos nichos en donde todavía pudiese mantenerse. Para más detalles os sugiero leer mi libro «Las raíces cósmicas de la vida» o mi blog: http://www.investigacionyciencia.es/blogs/astronomia/45/posts/flujos-de-agua-salada-en-marte-y-su-enorme-inters-astrobiolgico-13587
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